ALCALÁ DE HENARES. RECORRIDO
LA UNIVERSIDAD (Colegio Mayor de San Ildefonso):
El antiguo Colegio Mayor de San Ildefonso de Alcalá de Henares, conocido hoy como Universidad de Alcalá de Henares, lo funda el Cardenal Cisneros a principios del siglo XVI.
En él destaca, en primer lugar, su noble y monumental fachada, levantada entre los años 1541 y 1553 siguiendo las trazas del arquitecto Rodrigo Gil de Hontañón, configurada como un gran retablo en piedra realizado en tres plantas de altura con bloques de sillería, y distribuida simétricamente en tres cuerpos verticales convenientemente articulados por columnas y pilastras adosadas.
El elemento principal de esta artística fachada lo constituye su monumental portada, situada en el centro de la misma, que se abre al exterior en su nivel de acceso mediante un arco de medio punto que aparece flanqueado entre columnas pareadas de orden compuesto. En el cuerpo central se sigue un esquema similar, sustituyendo la puerta de entrada por un ventanal entre columnas más pequeñas y con un entablamento a modo de ático recortado que incluye un medallón, y a los lados los escudos del cardenal Cisneros, coronando el conjunto un frontón curvo finamente decorado. En el cuerpo superior, aparece triunfal el gran escudo imperial con el águila bicéfalas, también entre columnas pareadas, quedando rematado todo el conjunto de la portada por un gran frontón triangular donde figura un busto del Padre Eterno en el interior del tímpano.
De gran interés es el planteamiento de los ventanales que aparecen a cada lado de esta portada en los dos primeros cuerpos de la fachada, planteados a modo de ventana-estandarte, y que incluyen gran profusión ornamental de esculturas y copete sobre los frontones rectos en las inferiores, y curvilíneos en las superiores, más amplias y decoradas.
En el nivel superior, la fachada presenta a cada lado cinco ventanales de medio punto organizados según pilastras adosadas que superiormente se recrecen sobre la balaustrada de piedra que recorre horizontalmente los dos cuerpos laterales, cerrados mediante altos pináculos.
Interiormente una de las dependencias más destacables de este edificio es el conocido como "Patio Trilingüe", ejecutado por José de la Cótera en el año 1551, llamado también de San Jerónimo, y actualmente en la Hostería del Estudiante. Organizado en dos cuerpos de altura, cuenta con arcos carpaneles con medallones en las enjutas que se apoyan sobre columnas jónicas en el piso inferior, y en el superior con ventanas y pilastras sobre las columnas. En principio éste era el núcleo central del Colegio de San Jerónimo, en el cual se enseñaba latín, hebreo y griego, de donde le viene el nombre de Patio Trilingüe.
De gran interés es la Capilla de San Ildefonso de esta Universidad, decorada a partir de 1508 por Pedro Gumiel, el maestro del Cardenal Cisneros, mecenas de la misma. De una sola nave, fue construida con ladrillo y mampostería, pero luego cubierta con un magnífico artesonado en madera policromada a base de lazos, y sus muros cubiertos con ricas yeserías realizadas por el maestro Gumiel. En su interior aparecen molduraciones clásicas junto con arcos mixtilíneos y otros elementos de pervivencia gótica, aunque con ornamentación propia del renacimiento; y se muestra el sepulcro del fundador, el Cardenal Cisneros.
También fue Cisneros el propulsor del Paraninfo, antigua Aula Magna de la Universidad, y escenario donde actualmente se otorgan los prestigiosos Premios Cervantes. Comenzado a levantar en el año 1517. Se trata de un elegante salón rectangular cubierto con un artístico artesonado mudéjar de lacería. En uno de sus lados está adosada una monumental tribuna que se comunica con el interior mediante tres huecos, el central de medio punto rematado por un ático que incluye una concha avenerada, siendo los dos laterales adintelados; todo ello flanqueado por pilastras fragantemente talladas. Sobre la parte superior del muro aparecen huecos cubiertos por arcos escarzanos que, organizados entre pilastras apoyadas sobre ménsulas y repartidas a igual distancia, se abren al interior.
LA PLAZA DE CERVANTES:
La Plaza de Cervantes o antigua Plaza del Mercado
es el centro neurálgico de Alcalá de Henares, zona de reunión de gente de
toda condición, universitarios, políticos, turistas, paseantes, mirones y un
largo etcétera, se encuentra dentro del recinto histórico y flanqueada por
diversas áreas de la Universidad, el más preciado tesoro de esta ciudad,
por todo ello Alcalá ha sido calificada por la Unesco como Ciudad Única, una de
la 9 consideradas en España con tal calificativo además de estar declarada Patrimonio de la Humanidad desde 1.998.
Antiguamente se la conocía con Plaza del Mercado, en ella
podemos encontrar zonas ajardinadas, un templete o Quiosco de la Música,
realizado por la fundición Lebrero de Madrid en el año 1898, sobre un diseño de
Martín Pastells, y el Monumento a Cervantes, una escultura en bronce realizada
en el año 1879 por Carlo Nicoli. Se halla sobre un pedestal decorado con
relieves modernos que representan escenas del quijote y son obra de Pepe Noja.
Es una plaza llena de encanto, por los cuatro costados
encontramos edificios de interés como el Circulo de Contribuyentes del S.XIX,
hermosas fachadas, patios interiores, restaurantes, oficina de turismo, Torre
de Santa María, Centro de Interpretación "Los Universos de
Cervantes", el Quiosco de la música del S.XIX y el monumento a Miguel de
Cervantes, conocido por muchos de los alcalaínos como "El Monigote",
usado el termino en el sentido más cariñoso posible y por último el Corral de
Comedias del siglo XVII.
El Corral de Comedias del S.XVII
Este magnífico corral de comedias surge por una idea de
Francisco Sánchez, carpintero de profesión, que quería que Alcalá contase con
un teatro estable, así en 1601 se pone manos a la obra siguiendo el esquema
clásico de corral de comedias con balcón de apariencias, cazuela, aposentos y
suelo empedrado con pozo que ha durado hasta nuestros días. En su origen podía
acoger hasta 600 personas y los hombres estaban separados de las mujeres
durante las representaciones, el espacio destinado a estas últimas era la
cazuela.
Durante algún tiempo se prohibieron las representaciones por los
disturbios que ocasionaban y por que el gusto de la burguesía, lo que ahora
llamaríamos moda, derivó hacia la opera.
Es el teatro en funcionamiento más antiguo de Europa y de los
mejor conservados.
Torre
de Santa María la Mayor
Esta solitaria torre se alza en el extremo sur de la Plaza de
Cervantes, junto a ella se conservan parte de los ábsides y varias capillas
como la Antezana y la del Oidor con yesería de estilo mudéjar donde se conserva
la pila bautismal donde un 9 de octubre de 1.547 fuera bautizado Miguel
de Cervantes Saavedra. Todo ello son restos de lo que fue la Iglesia de
Santa María la Mayor incendiada durante la Guerra Civil.
En estas capillas se halla hoy el Centro de Interpretación
"Los Universos de Cervantes" espacio creado en 2005 como colofón a
los actos de conmemoración del IV Centenario de la primera parte de El Quijote
y donde podemos encontrar ejemplares en diversos idiomas de El Ingenioso
Hidalgo Don Quijote de la Mancha además de proyecciones, exposiciones
permanentes y temporales sobre la figura y la obra de tan gran escritor.
La torre acabó de restaurarse en 2009 y desde ella se tiene una
magnífica vista de la ciudad, eso sí, después de subir sus 109 escalones por
una escalera metálica de caracol,
Ayuntamiento
El antiguo colegio-convento de San Carlos Borromeo o de
Agonizantes, edificio del siglo XVII, se convirtió en sede del Ayuntamiento de Alcalá
de Henares en el S.XIX y conserva esta función actualmente, destacan en su
interior el salón de plenos del S.XIX, la planta noble y la Sala de Junta de
Gobierno en la que se encuentran, entre otros objetos de valía, la partida de
bautismo de Cervantes y la Biblia Políglota Complutense.
LA CALLE MAYOR:
Surge en el siglo XII como uno
de los principales ejes de la villa medieval, que se desarrolla de forma radial
alrededor de la iglesia de los Santos Niños. La calle Mayor unía la antigua
plaza de la Picota (hoy de los Santos Niños) y la antigua puerta de
Guadalajara.
Constituyó la zona comercial
del barrio judío, y ha mantenido esa función comercial hasta la actualidad. Su
aspecto, sin embargo, ha sido modificado a lo largo de los siglos.
Los originarios pies derechos
o postes de madera de los soportales fueron sustituidos, durante los siglos XV
y XVI, por columnas de piedra circulares, siguiendo órdenes de los arzobispos
Carrillo, Cisneros y Tavera. En el siglo XIX, estas columnas fueron, a su vez,
cambiadas por pilares. A pesar de ello, aún quedan ejemplos de las antiguas
columnas de piedra; en éstas pueden apreciarse algunos restos de pintura de
época barroca que corresponden a la celebración de las fiestas más señaladas, como
por ejemplo la del Corpus.
Las casas de la calle Mayor
estaban formadas por una planta alta (dedicada a vivienda) y una planta baja
(dedicada al comercio). La planta alta tenía una galería cubierta o corredor
que comunicaba a los habitantes de las distintas viviendas sin que tuviesen que
bajar a la calle. Este corredor fue cegado a partir de la expulsión de los
judíos de España en 1492, pero existen varios ejemplos en la ciudad que nos
permiten hacernos una idea de cuál era su aspecto: el patio del 'Hospitalillo'
o el de la antigua Hospedería de la Universidad.
A partir del plan de urbanismo
de 1848, la calle Mayor gana uniformidad en altura y alineación, y pierde esa
irregularidad urbana que tanto encanto presenta en las localidades medievales,
y que esta calle Mayor mantiene en varios grupos de casas. También se conservan
algunos corrales o adarves, como el Corral de la Compaña y el de la Sinagoga
(donde estuvo la parte trasera de la Sinagoga Mayor y la Escuela Talmúdica). La
sinagoga menor estaba situada en la calle de Santiago.
LA CASA DE CERVANTES:
Esta casa fue el lugar donde nació, en
1547, y donde pasó parte de su infancia Miguel de Cervantes, hijo del también
alcalaíno Rodrigo de Cervantes y de Leonor de Cortinas.
La ubicación de la casa natal de Cervantes se debe al investigador Luis Astrana Marín que hizo públicas sus conclusiones en 1948, ya que en dicha fecha la casa ya había sido derruida. La casa era, en tiempos de Cervantes, propiedad de su tía María y en ella viviría hasta 1551, cuando se trasladó a Valladolid, donde también se puede ver su otra casa.
Es un edificio de dos plantas que hace esquina con las calles Mayor y de la Imagen. Recrea los distintos ambientes de la vida cotidiana de una casa acomodada de los siglos XVI y XVII. La reconstrucción se hizo en 1956.
LA CATEDRAL MAGISTRAL:
Data de1514 y presenta un
marcado estilo gótico isabelino.
Es, junto con la iglesia de
San Pedro de Lovaina (Bélgica), el único templo en el mundo que posee el título
de Iglesia Magistral, lo que suponía que todos sus canónigos debían ser
doctores en teología.
Historia
La historia del templo se
remonta a la Hispania romana, a la llamada Gran persecución de los cristianos
durante el gobierno de Diocleciano (284–305). En ese contexto se produce el
martirio de los Santos Justo y Pastor que, con siete y nueve años de edad, son
ejecutados en 304 en las afueras de Complutum por su oposición a rehusar del
cristianismo.
En el lugar donde fueron
ejecutados, y con el cristianismo aceptado en el imperio, se levanta una
capilla para albergar sus restos en 414. Durante el periodo visigodo se
convirtió en catedral, y sus obispos aparecen en los distintos concilios de
Toledo desde el siglo VI. En el año 1053 Alcalá (o más bien el castillo de
Alcalá la Vieja) fue conquistada por Fernando I de Castilla. Al año siguiente
los musulmanes la reconquistan, destruyendo como represalia la catedral,
obligando a los mozárabes a trasladarse a Guadalajara y siendo enviados los
restos a la actual provincia de Huesca, hasta que en 1118 se reconquista la
ciudad y el templo se reconstruye en1122. Sin embargo, el arzobispo de Toledo
Raimundo de Sauvetat consigue, gracias a su amistad con el papa Urbano II que
no se restituya la diócesis de Alcalá, y obtiene en 1129 la donación de Alcalá
y sus tierras al arzobispado de Toledo de parte de Alfonso VII.
El arzobispo Carrillo
(1446–1482) reconstruye la iglesia y la eleva a la categoría de colegiata. En
la época del Cardenal Cisneros (1495–1517) se la otorga el título de
"Magistral" y se proyecta el actual edificio, construyéndose entre
1497 y 1514en un estilo gótico típico de esa etapa. La portada presenta rasgos
flamígeros; la torre se construye entre 1528 y 1582, recibiendo su aspecto
actual en 1618, mientras que el claustro procesional y la capilla de San Pedro
se incorporan en el conjunto en el siglo XVII.
En 1904 la Magistral es
declarada Monumento nacional. Durante la Guerra Civil Española (1936–1939) la
iglesia es incendiada perdiendo prácticamente todos sus tesoros, salvándose
algunas rejas y unas sillas del antiguo coro. En 1991 se restaura la diócesis
de Alcalá y es elevada a la categoría de catedral-magistral, recuperando
aquella diócesis complutense que hubo desde el siglo V hasta el año 1099.
El edificio
El exterior del templo es
sencillo y austero. Las paredes están cubiertas por esgrafiados de tipo
segoviano. Destacan la portada de la fachada occidental, de estilo gótico
florido, en cuyo medallón central se representa a san Ildefonso; y la alta
torre, obra de Rodrigo Gil de Hontañón y Rodrigo Argüello, de estilo
renacentista, con una altura de 62,05 metros. Remata esta torre un hermoso
chapitel con pizarra de indudable estilo herreriano.
La catedral cuenta con un
severo claustro del siglo XVII con arquerías entre pilastras. Los suelos
aparecen cubiertos por alfombras renacentistas procedentes de conventos
alcalaínos. En uno de los muros se conserva la sepultura del cardenal Cisneros.
Desde el claustro se accede a la Sala Capitular y la antigua biblioteca,
decorada por Angelo Nardi, ahora Museo Catedralicio.
El interior del edificio está
dividido en tres naves, cubiertas por bóvedas de crucería apoyadas sobre
pilares fasciculados. La forma general del edificio se asemeja a la tradicional
planta de cruz latina con marcado transepto. El edificio entero sufrió mucho en
el mencionado incendio, y se perdieron innumerables obras de arte y objetos de
gran valor histórico, devocional y sentimental. Actualmente el templo alberga,
aparte de sus funciones religiosas, un Centro de interpretación y el Museo
catedralicio.
La nave central, alzada sobre
las naves laterales, sorprende la falta del retablo mayor, que fue una obra
gótica con tablas pintadas alusivas a la Pasión de Cristo. En el presbiterio,
se conserva una mesa regalada por el papa Sixto V a Felipe II. El espacio está
presidido por la imagen de la llamada Virgen de Cisneros, y cerrado por una
excelente reja, una de las que sobrevivieron al incendio de 1936.
El coro ha sido reconstruido a
partir de algunos restos conservados del antiguo. El ábside posee recios
contrafuertes al exterior y una girola en la que se alternan tramos
triangulares y rectangulares apoyados en pilastras góticas con cardinas. En la
misma girola está la cripta de los santos Justo y Pastor.
Allí se conserva una urna, con
relieves en plata y oro, obra de los hermanos Zureno (1702), en el que reposan
los restos de los santos y la piedra en la que fueron martirizados. Estas
reliquias fueron trasladados a Huesca y posteriormente a Francia durante la
invasión musulmana.
De la nave del Evangelio, prácticamente
no se conserva nada del templo antiguo. El espacio se ha destinado a Centro de
interpretación de la catedral.
En la Nave de la Epístola se
sitúan las capillas más importantes y la parroquia de San Pedro. Esta última
fue construida en 1622; presenta una portada de granito en estilo herreriano y
un interior barroco, con cúpula de media naranja.
La capilla de la Virgen del
Val alberga la imagen de la patrona de Alcalá. La del Ecce Homo presenta una
singular estructura en la techumbre que contrasta con la sencilla entrada en
arco de medio punto. En la capilla que lleva su nombre se venera el cuerpo
incorrupto de san Diego de Alcalá, que se expone a los fieles cada 13 de
noviembre, día de su festividad.
De las once capillas que
poseía la catedral originariamente, solo se conservan cinco, y los lados
correspondientes a las otras seis están pintados en la pared sugiriendo el
espacio faltante.
Tras la elevación del templo a
catedral, el interior fue restaurado y renovado. Se efectuaron excavaciones que
pusieron de manifiesto enterramientos de los siglos XVI, XVII y XVIII.
EL PALACIO DE LAREDO:
También se le denomina Hotel o Palacio Laredo, o Quinta La Gloria. Está situado en el Paseo de la Estación de Alcalá de Henares (Madrid - España). Fue construido por Manuel José Laredo y Ordoño (1842-1896), entre 1880 y 1882, como vivienda particular en estilo neomudéjar con decoración interior en yeserías y azulejos de inspiración oriental, como el minarete con reloj que asoma al exterior.
Fue vendido por su propietario en el año 1895,
que luego marchó a vivir a Madrid. También es conocido como Hotel
Laredo, no por alojar huéspedes, sino por ser una casa aislada de las
colindantes y habitada por una sola familia. En los años ochenta fue rehabilitado por la arquitecta Genoveva Christoff Secretan.
En la actualidad el edificio pertenece al Ayuntamiento de Alcalá de Henares, y es la sede del Museo Cisneriano y del Centro Cisneriano de Investigación. Alberga una colección de antiguos documentos de la Universidad de Alcalá, entre los que destacan una edición original de la Biblia Políglota Complutense, y la Biblia Políglota de Amberes.
Su estilo ecléctico neomudéjar, incorpora elementos góticos,
renacentistas, pompeyanos y modernistas, con una exhaustiva utilización
de las posibilidades decorativas del ladrillo caravista. En torno al edificio se conserva uno de los pocos jardines románticos que perduran en la ciudad.
En su interior hay 15 piezas arqueológicas originales trasladadas por
su propietario desde edificios de los siglos XV y XVI. Así, la bóveda y
columnas del Castillo de Santorcaz, artesonados del palacio de los Marqueses de Tendilla (Guadalajara), y azulejos procedentes del palacio de Pedro I el Cruel de Jaén y Toledo. Hay salas inspiradas en la Alhambra, y frescos con motivos pompeyanos y platerescos. El Salón de los Reyes
está decorado con pinturas de distintos monarcas, y en el techo
presenta una representación del firmamento como se concebía en la Edad Media; en la actualidad sirve de salón de actos y sala de conferencias.
La mezcla de varios estilos arquitéctonicos le dan una singularidad
al monumento. Su autor se inspiró, no obstante, en lo que se conoció
como el movimiento "Arts and Crafts", impulsado por William Morris
en Inglaterra. Las decoraciones con pinturas de cada estancia y con
diseños ambientales diferentes para cada una, hacen de este edificio un
ejemplar de la tendencia modernista de la época, y desde luego de
excepcional interés arquitectónico en la Comunidad de Madrid.